Sunday, January 29, 2006

Havoc!

Hay un fantasma en la casa y llevo días mal durmiendo. Ayer fue la crisis fantasmagórica del mal, ya no es gracioso.

Yo nunca había tenido experiencias de ese tipo y a pesar de ser una cobarde del mal y a pesar de que mi mamá asegura que hay un fantasma en mi casa en Monterrey, ni le creí ni me quitaba el sueño.... y eso que vivía sola. Todo el asunto me sonaba mucho a chismorreo de vieja sin quehacer o a la mala fortuna de que mi madre anduviera regando sus plantas en la noche y asustando gente.

Debo confesar que sólo la he visto una vez, pero gradualmente ha aumentado el terror. Al principio era risita: jejeje, el fantasma jejeje y a la cama a dormir tan tranquila. Confesaré que pensaba que había sido mala suerte o que eventos externos estaban afectando el ambiente.

Cuando me voy a dormir estoy con los ojos para afuera tratando de asegurarme de que no hay fantasma. Duermo con la luz prendida, y dormir es un eufemismo para decir, duermo cuando ya no aguanto más y me vence el sueño, pero cualquier cosita me despierta. A los que me conocen saben que despertarme es una tarea titánica... y ahora me despierto cada cinco minutos.

La teoría de Justin es que el fantasma no es malintencionado y pues a pesar de que su presencia no me era del todo agradable, pensé que podíamos coexistir pacíficamente. Fantasmita: yo respeto tu mal gusto para elegir perfumes y tu respetas mi derecho a dormir pacíficamente. al principio todo iba bien si descontamos el hecho de que me despertaba cuando Justin se iba y me mudaba al sillón de la sala, pero ha ido agarrando confianza y ya me está cayendo gorda.

La tipa en cuestión: porque es una mujer flacucha y triste que se para en el rincón de la habitación; tiene el mal hábito de despertarme en medio de la noche con el hedor de un perfume espantoso que ha de estar prohibido en los países desarrollados. En cuanto el perfumito aparece en el cuarto, es que ya anda por ahi rondando. Mi lado razonable le adjudicaba el fenómeno a alguna vecina atrapada en los ochentas, pero si consideramos que el fenómeno se repite a horas improbables para andarse perfumando (4-5 mañana) y que Justin no detecta el olor, pues no me explico.

Hace algunos días me desperté gritando porque algo me despertó y flotaba encima de mi. Ayer no me podía dormir porque nuestra amiga se dio a la tarea de despertarme haciendo ruiditos en la cabecera de la cama... y otra vez, despertar gritando y el éxodo a la sala.

Estoy de mal humor.

2 comments:

Anonymous said...

No te preocupes, estás padeciendo de alucinaciones hipnagógicas, son tremendamente comúnes, a mí también me dieron, pueden ser muy complejas, involucrando sensaciones visuales, auditivas, táctiles e incluso gustativas y olfativas. Le dan a cerca de la tercera parte de la humanidad, por eso tantas personas creen que hay fantasmas, trata de cambiar de postura al dormir y si los problemas siguen, ve a ver a un especialista en desórdenes del sueño, hay un estudio de una universidad canadiense, (creo que es la de Waterloo) que parece señalar que el prozac ayuda. Puedes darte de santos de que las tuyas sean tan "ligeras", hay algunas que son tremendamente escalofriantes, pero no pasa nada.

Anonymous said...

Naquis... que terror.

¿Y si pones una pastilla desodorante de esas super potentes para carro? de un olor más feo que el perfume de la mona... igual y así ya no le dan ganas de aparecer.